Recuerdo....

 Hace ya varios años, pintan ya un par de décadas y más, en una pequeña ciudad llama Peace, comenzó la historia de una joven pareja, o algo así. Él, un loco infortunado, sin razón ni propósito de vida, hasta sus 21, ella, gacela fugaz de las que en silencio callan y se alejan. Ambos sin rumbo, prácticamente sin raíces y aparentemente sin vida. Llevaban sus vidas errantes, gitanos, con la vista siempre en la inmensidad de los cielos buscando, añorando, soñando.

 El destino, si así lo quieres llamar, hizo sus movidas para que se encontraran, porque dos vidas, tan llenas de nada, merecen algo inmenso para llenar semejante soledad. Ambos, con aire de eruditos, se llenaban los ojos y la mente con colecciones de revistas de los 80's. Llegaron a punto, de simplemente y reconocerse, distancia de unos 8 metros para el primer flechazo, un abismo al medio que sostenía un montón de gente y dos agujeros llenos en los extremos llenando los pechos inflamados de mutua mirada.

Los que atestiguaron el choque de estos astros desconocidos, temidos y hasta cierto punto denominados entrópicos, reconocieron que en el aire y el aliento de estos, se exhalaba el aroma a algo como amanecer en el amazonas, fresco, rebelde, apasionado y mortal. Había nacido el amor, o algo así.

Detonaron las miradas y la conjunción de los corazón dio a nacer un hálito de amor, de fragancia que inundaba la sala, y mientras ellos giraban la cabeza, alegando ignorancia, sus almas se entrelazaron en una danza eterna, mientras se contemplaban de reojo, a 8 metros, simples 8 metros sin si quiera saber sus nombres.